- Ganar productividad como un medio para tener más tiempo es uno de los objetivos que este doctorado en Harvard y profesor de la Universidad de Chile plantea para la comisión de Joseph Ramos.
- “Todos los problemas de meritocracia son problemas de productividad. Hay una gran diferencia entre los colores de piel que uno ve en la selección de fútbol y los colores de piel que uno ve en los directorios de las empresas del IPSA. Algo de eso se podría explicar por capital humano, ¿pero no será que tenemos problemas para detectar talento de primer nivel?”, plantea.
Publicado por La Segunda, Viernes 26 de febrero de 2016. Entrevista realizada en colaboración con Francisca Garrido.
Rodrigo Wagner estudió agronomía en la Universidad Católica. Y todavía le queda algo de esos primeros años universitarios porque entre sus ejemplos abundan los tractores, los nogales y las hectáreas. Su interés por la economía comenzó cuando conoció a Vittorio Corbo –ex presidente del Banco Central- y de ahí saltó a hacer un master y luego un doctorado en economía en la Universidad de Harvard.
Hoy es profesor de la Facultad de Economía y Negocios de la Universidad de Chile y profesor asistente de la Tufts University. Ha realizado trabajos junto al venezolano Ricardo Hausmann –director del Centro para el Desarrollo Internacional
de la Universidad de Harvard- relativos al colapso del crecimiento y al chileno Andrés Zahler –jefe de la división de innovación del ministerio de Economía- sobre las nuevas exportaciones para los mercados emergentes. Su cuenta twitter dice: “trabajo buscando cuellos de botella” y quienes están vinculados con el tema de mercado laboral lo mencionan como uno de los que realiza el índice de productividad de la comisión que preside Joseph Ramos, pero Wagner lo deja en una nebulosa y dice que habla a título personal.
-¿Qué es productividad?
-En términos técnicos, se define como la cantidad de producto que tú elaboras por unidad de insumo que ocupas. Es decir, cuántos kilos de papas produces por tractor.
-¿Tenemos o no una caída en la productividad?
-Depende de cómo se mida. Si hay un boom de inversión, por ejemplo, más plantaciones de nogales o más proyectos de cobre, va a caer la productividad. Eso ha pasado en Chile en los últimos 5 años. Si tienes una economía donde se liberaliza el mercado de capitales y de pronto puedes comprar todos los tractores que requieres vía deuda, el índice de productividad también cae. Ninguna de estas dos cosas son malas. Los indicadores de productividad son un ratio, hay que mirarlos con cuidado, no es como la inflación ni el PIB.
Hay otra razón por la cual puede caer la productividad, que poco tiene que ver con ella, que es cuando cae la demanda.
-¿Por qué es tan complejo medir la productividad?
– Porque, por ejemplo, los nogales se demoran 5 a 8 años en crecer. Si a un agricultor le va bien, decidirá plantar una segunda hectárea. En un año duplicó la superficie, pero sigue produciendo la misma cantidad mientras la nueva hectárea no entra en producción. Entonces, su ratio de productividad cae. Algunas inversiones en la economía chilena tienen el mismo “problema” de los nogales, el “time to build” (tiempo para construir). Cuando se pasa por un boom como el que tuvo la economía chilena (en minería), hay un par de décimas de crecimiento que hay que medir bien porque el stock de capital es el número de nogales diferenciado por edad.
-¿Eso es lo que nos ha pasado en el análisis?
-No necesariamente. En el último tiempo se han generado muchos puestos de trabajo por cuenta propia que en promedio son sectores con menos productividad. ¿Por qué se dejaron de mover a sectores de más productividad? Si antes se demoraban 1 hora en llegar al trabajo y ahora se tardan 2 horas, puede ser una razón para quedarse en casa. Los tacos en la ciudad, te destruyen la productividad.
Llegar rápido a la pega
–Ahora, hay cambios de tecnología que permiten a la gente operar desde sus casas…
—Si trabajas en aseo, no puedes hacerlo vía internet, tienes que tragarte las dos horas de Transantiago. El Iphone mejora mucho más la productividad a profesionales como usted o yo que a alguien que se dedica a la limpieza.
–¿Cómo logra que la productividad sea un tema de política pública?– La comisión de Joseph Ramos propuso que todos los proyectos de ley incluyan su impacto en la productividad, al menos, un calculito de servilleta.
-¿Las concesiones ayudaron a la productividad?
-En su momento sí ayudaron. ¿Qué haríamos hoy sin la Costanera Norte? Ahora uno podría pensar que estamos sub-invirtiendo en infraestructura. José De Gregorio, Alejandro Aravena e Iván Poduje plantearon en “Grandes Alamedas” que se necesita algo para que la gente llegue rápido al trabajo. Las mujeres son más sensibles a estos costos de transporte dentro de la ciudad, porque en promedio viajan menos, entonces su incorporación al mercado del trabajo, pasa por preocuparse de que lleguen rápido al trabajo y no tanto de las salas cunas… La productividad no es una cosa que ocurre en las fábricas, sino que en las ciudades.
-Su enfoque está más asociado a calidad de vida que a productividad en el sentido tradicional.
–Una cosa es que se logre productividad y otra cosa es lo que cada uno haga con esa productividad. Puede implicar tener una hora más con su hijo y no necesariamente llenarse de televisores. ¿Prefiere 20% más de sueldo o los viernes libres?
“Las fluctuaciones mensuales tienden a no medir productividad”
-¿Quiénes están haciendo el índice de productividad?
-Habrá varios índices de productividad porque hay que medirla de distintas maneras. ¡No es como el IPC que se mide bien o mal! Una manera de hacerlo es a nivel agregado. Por ejemplo, Corfo le solicitó a la Universidad Adolfo Ibáñez una metodología agregada, que verifica, por ejemplo, la capacidad ociosa a través del uso de electricidad. La idea es que una panadería no gasta en luz cuando cierra durante 2 semanas en febrero, pero debe mantener su planilla de trabajadores y su equipo. Hay otras 4 o 5 maneras de medirla.
-¿Quién va a medir?
-La comisión va a agregar los datos que se producen en otras partes de la economía y entiendo que publicará estos indicadores. Muchos de los insumos se generan en otras partes del Estado. No funcionará como el INE que encuesta y verifica si los precios suben o no.
-¿El ministerio de Economía está haciendo algo en términos de indicadores?
-Con el equipo de la división de Innovación del Ministerio de Economía está siguiendo una metodología de la OCDE para medir productividad de manera estandarizada. Está construyendo una muestra de empresas, de cierto tamaño y sector, elegirá a algunas de ellas y las someterá a una serie de preguntas detalladas. Sus respuestas las extrapolará al resto de empresas de similares características y se podrá comparar con otros países. Se espera contar con la colaboración del SII y el ministerio de Economía está a cargo de esto, porque cuesta mucho compartir datos dentro del Estado. La Comisión de Productividad lo que quiere hacer un poco es lubricar que se compartan datos.
–¿Los nuevos indicadores se darán a conocer cada 30 días?
-Las fluctuaciones mensuales tienden a no medir productividad porque son muy sensibles a fluctuaciones de la demanda. Entiendo que será un indicador anual.
“Hay una gran diferencia entre los colores de piel de la selección y los colores de los directorios”
-¿Qué haría usted para aumentar la productividad?
-Chile podría tener un programa agresivo de atracción de inversiones de multinacionales en el sector manufacturero y de servicios que den trabajo no sólo a personas con título universitario, sino que a trabajadores técnicos de mediana calificación. Por ejemplo, replicar el esfuerzo que se hizo para atraer a la naviera Maersk, que se instaló en San Antonio y capacitó a la gente contra una orden de compra: “Usted aprende a soldar y tendrá el puesto”. Productividad es cuando sube el precio de las asesoras del hogar, es decir, cuando suben los sueldos de la gente porque pueden trabajar en otra cosa.
También sabemos que las multinacionales tienen mejores prácticas de gestión que las empresas chilenas.
-¿Cómo afecta esto la productividad?
– Todos los problemas de meritocracia son problemas de productividad. Hay una gran diferencia entre los colores de piel que uno ve en la selección de fútbol y los colores de piel que uno ve en los directorios de las empresas del IPSA. Algo de eso se podría explicar por capital humano, ¿pero no será que tenemos problemas para detectar talento de primer nivel? Eso es una especulación, pero muchas de las empresas en Chile son familiares que a lo mejor tienen que tener algún ajuste en esta dimensión.
-Usted está a favor de traer actores, más que imitar modelos de innovación.
-Es que una manera de imitar, es primero traer a alguien a quien le puedas copiar. La revolución del vino en Chile, la hizo Miguel Torres, que llegó, se instaló y luego todos le copiaron.