Bill Gates se describe a sí mismo como un tecnócrata. Pero él no cree que la tecnología podrá cambiar al mundo. “Ciertamente que me gusta la tecnología. Pero cuando hay que mejorar la calidad de vida de las personas, hay que tratar con cosas más básicas como la sobrevivencia de los niños o la malnutrición infantil”, explica.En estos días parece que cada billonario occidental tiene una visión sobre cómo la tecnología puede hacer de este mundo un mejor lugar para vivir. Por ejemplo, Mark Zuckerberg – creador de Facebook- ha planeado conectar a 5 mil millones de personas que hoy no están conectadas. Pero consultado si esto es más importante que encontrar una vacuna contra la malaria, Gates no esconde su irritación: “¿Cómo prioridad? Es una broma”.