- Su propósito no fue hablar de cambios legales a la Reforma Tributaria, sino que revisar posibles ajustes o aclaraciones administrativas.
Seguir leyendo → “La comida que Máximo Pacheco organizó con las auditoras en nombre de Hacienda”
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Dos socios se independizan de KPMG. Se trata de Javier Jaque y Boris León, quienes están formando su propia oficina de auditoría tributaria. Ya acordaron una alianza con la oficina de Recabarren y Asociados, que comanda Soledad Recabarren, quien les contratará los servicios de cumplimiento para sus clientes.
Jaque y León ingresaron a KPMG en 2013. Para Jaque su entrada a la auditora implicó su privatización, pues llevaba siete años en el área de fiscalización de Grandes Contribuyentes del Servicio de Impuestos Internos. En tanto que León emigró desde el estudio Carey Abogados donde se desempeñaba como director de auditoría tributaria.
Ya KPMG tomó cartas en el asunto y reclutó a Rodrigo Avalos como nuevo socio de cumplimiento quien llega a fin de mes. Hasta hace un año éste formaba parte de las filas de EY. En tanto que la empresa prepara la promoción interna de otros nuevos socios. En la actualidad, el área de tax tiene cinco socios (incluido Avalos), 150 profesionales y en los últimos cinco años sus ingresos habrían crecido 400%, señalan fuentes internas.
Esta no es la única de las cuatro grandes que sufre cambios relevantes. Se dice que en EY se estarían retirando 5 o 6 socios, uno de los cuales es Jorge Vargas (impuestos). Los otros corresponderían a auditoría y asesoría. No se pudo confirmar esto con la firma.
A las que se suma Deloitte que vio irse a los socios de la división Tax& Legal, Pablo Vera y Alvaro Meckenblurg, junto a Claudia Gómez. Antes ya se habían marchado otros dos socios más.
Publicado por El Mostrador Mercados, lunes 8 de junio de 2015.
“No maten al mensajero” dice la asesora tributaria ante un grupo de inversionistas de alto patrimonio que fue reunido por un banco. La cara de la audiencia, un grupo de 20 personas, es de perplejidad ante las imágenes en power point que dan cuenta de los nuevos escenarios que se configuran con la aprobación de la Reforma Tributaria.
El estado de ánimo de los oyentes es de pánico y las dudas apuntan a encontrar vías de escape. ¿Y si hago esto?, pregunta uno. Ya no se puede, le contesta la abogado. ¿Y si se arbitra entre este régimen y este otro?, sale otro. Tendría que liquidar lo no pagado, le responde. ¿Y si armo una sociedad que se interponga entre ésta y la de abajo?, interroga uno que está sentado en la testera. ¿Para qué?, le retruca la asesora.
Poco a poco, el escenario va decantando y el abatimiento sólo es remediado con una buena broma al final del encuentro. La escena se repite reunión tras reunión.
Publicado por El Mostrador Mercados, viernes 17 de octubre de 2014.
Publicado por El Mostrador Mercados, viernes 13 de junio de 2014
Las auditoras escapan a los intentos de domarlos y hacen lo que ellas quieren, dice Michael Skapinker en Financial Times. “The big Four” como se conoce a las cuatro grandes auditoras (PwC, Deloitte, Ernst&Young y KPMG) sólo prosperan, no importa qué es lo que hagan, añade.
Y pone los siguientes ejemplos: Ernst&Young pagó una multa de 750 mil libras por Farepak, reporteó Financial Times en diciembre, empresa que colapsó después de que 114 mil personas le confiaran sus ahorros.
Deloitte también canceló una multa de 14 millones de libras por el caso MG Rover en septiembre, debido a que el auditor falló en manejar sus conflictos de interés con los inversionistas, quienes habían colocado cerca de 40 millones de libras en el fabricante de automóviles. Se perdieron 6.000 empleos.
PwC también fue castigada con 1,4 millones de libras por una mala auditoría en 2012, porque fue incapaz de descubrir que JP Morgan Chase (el banco norteamericano) no había resguardado el dinero de sus clientes.
El mes pasado, la Comisión de Valores de los EEUU (SEC) dijo que KPMG había accedido a pagar US$ 8,2 millones porque había prestado servicios no auditados impropios a clientes cuyos balances eran auditados por ellos.
Antes de la crisis bancaria de 2008, las auditoras mostraron una “preocupante falta de escepticismo” en las instituciones financieras que auditaban, señaló la Autoridad de Servicios Financieros de UK, recuerda FT.
Ya en 2002, la firma auditora Andersen había sido despedazada en su rol de auditor y consultor de Enron, empresa de energía que se fue al despeñadero por sus malas prácticas corporativas. Entonces, los reguladores decidieron que el problema radicaba en la provisión tanto de servicios de auditoría como de consultoría. El acta Sarbanes-Oxley de los EEUU restringió los servicios que las auditoras podían ofrecer a sus clientes. Medida que dolió a las firmas. Sin embargo, nuevamente las Cuatro Grandes están incursionando en el negocio de consultoría. Mientras que sus ingresos de auditoría cayeron en US$ 5 billones en los últimos cinco años, los de consultoría subieron en US$ 16,1 billones. Los ingresos totales alcanzaron los US$ 113,8 billones el año pasado que contrasta con los US$ 110 billones de 2012.
Y lo que ellas están haciendo es un fuerte lobby para evitar cualquier reforma significativa. Cuando un borrador sugirió que la Comisión Europea estaba planeando ordenarles cambiar sus áreas de consultoría y limitar las relaciones de auditoría a seis años, las Cuatro Grandes se rebelaron.
“Cualquiera que contemple la carrera de auditor puede estar seguro que este negocio nunca podrá ser domado”, es una de las conclusiones del autor.
Publicado por Financial Times, 19 de febrero de 2014.