Crece preocupación de Obama por fuga de compañías norteamericanas en busca de sistemas tributarios más amigables

  • Los políticos en EE.UU. están preocupados por la cantidad de fusiones y adquisiciones que se están produciendo con el objeto de cambiar a las compañías de domicilio y reducir el pago de impuestos.
  • Financial Times publica este artículo cuando en Chile se está a punto de aprobar una Reforma Tributaria que eleva a 27% la carga tributaria de las empresas.

En sus puntos más importantes, FT señala:

El secretario del Tesoro, Jack Lew, ha urgido a los miembros del Congreso a poner límites a los acuerdos de fusiones que persiguen cambiar el domicilio de las compañías con el objeto de reducir el pago de impuestos en los Estados Unidos, invocando un “patriotismo económico” como contrapartida de una práctica que ha cobrado fuerza en los meses recientes.

En una carta a Dave Camp, el presidente republicano del House Ways and Means Committee, Lew deja ver su molestia por las operaciones que se han producido desde mayo de 2014 cuando la compañía estadounidense farmacéutica, Pfizer, consideró unirse a la inglesa AstraZeneca con el objeto de relocalizarse, operación que falló.

“El Congreso debe legislar de manera inmediata… para cerrar este tipo de abusos a nuestro sistema tributario”, escribió Lew a Camp. La carta fue obtenida por Financial Times el martes. “Lo que necesitamos como nación es un sentido de patriotismo económico, donde todos nos beneficiemos o perdamos”, señaló el secretario del Tesoro.

La propuesta de la administración de Obama es elevar desde 20% a 50% la propiedad requerida para que sea válido el cambio de domicilio  y hacerlo retroactivo desde mayo de 2014.

Si la medida tiene efecto a partir de esa fecha, el Tesoro y los parlamentarios demócratas esperan evitar un aumento de las reestructuraciones de las compañías en los próximos meses. Sin embargo, una medida retroactiva es relativamente inusual, dice FT, y ha recibido las críticas de los grupos empresariales, los economistas conservadores y los legisladores republicanos.

La carta de Lew fue informada el martes por Wall Street Journal. Y se publicó justo después que Mylan, la farmacéutica de medicamentos genéricos, decidiera trasladarse a Holanda tras comprar el laboratorio de genéricos europeo, Abbott.  A lo que se suma la información de que la cadena de farmacias estadounidense, Walgreens, también está considerando una inversión en Suiza, mientras evalúa comprar el resto de Alliance Boots.

El principal motivo de las compañías estadounidenses para invertir fuera de sus fronteras es el impuesto corporativo de 35%, uno de los más altos del mundo, y el tratamiento tributario que se le dan a las ganancias en el extranjero cuando son repatriadas a EE.UU.

La administración de Obama y los congresistas republicanos tienen planes de revisar completamente el sistema de impuestos corporativos para hacerlo más competitivo a nivel global, pero han sido incapaces de llegar a acuerdo en muchos detalles, dejando la puerta abierta para el tipo de inversiones que está ocurriendo, señala FT.

No se espera una gran actividad legislativa hasta antes de noviembre cuando se produzcan elecciones, por lo que cualquier esperanza de una reforma impositiva no se producirá hasta inicios del año entrante.

Publicado por Financial Times, miércoles 16 de julio de 2014

 

 

 

Arenas se jugó por el proyecto político del Gobierno y no por su reforma

  •  Si el ministro de Hacienda claudicó o no en lo que comunicacionalmente había llamado el corazón de la reforma, importa poco. Consiguió un acuerdo transversal que le da viabilidad en el tiempo a una fuerte alza de impuestos.
  • Ahora la Nueva Mayoría debe velar porque los recursos lleguen a la ciudadanía. Eso se llama gestión.

El imperativo de recaudar 3% del PIB no es una idea loca del ministerio de Hacienda. Tiene un objetivo claro: invertir en bienes sociales –como educación- que aminoren la desigualdad. Si el ministro Alberto Arenas lograba ejecutar la Reforma Tributaria, pero las otras reformas se caían: el gobierno se quedaba sin proyecto político. Ese es el quid del asunto y por eso, negoció.

El ministro de Hacienda puede tener falencias, pero el protocolo de entendimiento sobre la Reforma Tributaria puso la viabilidad del programa del Gobierno por sobre sus intereses personales.

Si él hubiera velado únicamente por su ego, seguramente habría continuado con el proyecto de Reforma Tributaria tal como estaba. Pese a que 30 años de historia económica de este país, reflejado en las audiencias de los ex ministros de Hacienda y ex presidentes de Banco Central, ponían sobre el tapete de la discusión cuestionamientos razonables acerca de los mecanismos buscados para recaudar US$ 8.200 millones. Total tenía los votos de la Nueva Mayoría para hacerlo y difícilmente algún parlamentario de ese bloque habría votado en contra porque eso era irse en contra de Michelle Bachelet.

Si esa hubiera sido su decisión, habría aprobado la Reforma Tributaria aún a costa de hacer peligrar el resto de las reformas que ésta intenta financiar, principalmente educación. La crispación ambiental habría llevado a negarle la sal y el agua al ministro Eyzaguirre y el costo lo habría pagado este último al no ser capaz de generar un ambiente de diálogo que ya le es difícil.

Aunque también es verdad que existía la probabilidad de que el proyecto nunca fuera promulgado si el Tribunal Constitucional lo declaraba ilegal. La oposición estaba preparada para llegar a esa instancia si no se abría un espacio de negociación, pues estimaba que había visos de ilegalidad. También la coalición gobernante estaba minada por las mismas dudas.

Pero supongamos que Hacienda efectivamente tenía la certeza de que el veredicto le sería favorable, el sólo hecho de estar en esa discusión lo ataba de manos para realizar los cambios que realmente creía necesarios. Cualquier modificación se iba a interpretar como que lo estaba haciendo para soslayar el tema de la legalidad.

 Las expectativas mandan

El otro factor que pesó fue la desaceleración de la economía y la necesidad de dar vuelta las expectativas. No fueron suficientes una agenda de productividad, ni una agenda energética ni un plan de concesiones ambicioso. Todos estos anuncios llenaron los titulares por un día o dos y desaparecieron en el tráfago de información que provenía de la Reforma Tributaria.

Los discursos de Alberto Arenas cuando recién asumió el cargo apuntaban a decirles a los empresarios y al sector productivo en general que subirían los impuestos fuertemente, pero que al mismo tiempo habría una inversión relevante en productividad, energía y obras públicas. Ese diseño no supo apreciar en su justa medida el impacto que tendría sobre las expectativas el cambio estructural que la Reforma Tributaria planteaba. Por eso falló.

No es de extrañar entonces que las primeras reuniones después de la suscripción del acuerdo hayan sido con representantes empresariales. Hay que cambiar rápidamente el discurso de confrontación por uno constructivo para que el sector privado aquilate el nuevo escenario con acuerdo tributario transversal, plan de inversiones en Obras Públicas, agenda energética y fomento a la productividad.

 Plata habrá…

Dicho todo esto, resulta absolutamente lógico el camino que tomó Alberto Arenas y su equipo: conseguir los US$ 8.200 millones en una negociación con Renovación Nacional y la UDI que permite darle viabilidad política a la propia Reforma Tributaria y a los proyectos del Gobierno. Acuerdo que indudablemente implica un alza de impuestos relevante para las empresas y sus dueños y que a inicios de año parecía imposible de conseguir con los votos de la derecha.

Si el ministro Arenas claudicó o no en lo que comunicacionalmente había llamado el corazón de la reforma, importa poco. Si negoció entre cuatro paredes, no se ve otra manera de hacerlo si se quiere llegar a puerto y así lo entendieron los presidentes de partidos oficialistas cuando semanas atrás se les informó que se intentaría iniciar esta fase.

Lo que sí le debe importar a los que votaron por el programa de la Nueva Mayoría es que el objetivo de tener un país con mayor igualdad y con mayores oportunidades, se cumpla. Con la firma del protocolo, todos los sectores políticos –desde la UDI al PC- están tras el mismo objetivo.

Ahora, son los técnicos de los distintos sectores los que tendrán que hacer la pega a través de las indicaciones que se introduzcan al proyecto de Reforma Tributaria y asegurar que las metas políticas y de recaudación se viabilicen.

Después será el Servicio de Impuestos Internos el que tendrá que ponerse a la altura de las circunstancias y los ministerios encargarse de que el dinero no se pierda en la burocracia. Es en este esfuerzo de gestión donde se juega el proyecto político que Michelle Bachelet ofreció al país.

Publicado por El Mostrador Mercados, lunes 14 de julio de 2014

¿Cuándo se deben subponderar las acciones estadounidenses?

Andrew Smithers publica en la sección de blogs del Financial Times la pregunta que ronda a los inversionistas, dado que el Dow Jones ha tocado los 17.000 puntos: cuándo se deben subponderar las acciones estadounidenses.

El dice que EEUU parece caro en comparación a  otros mercados bursátiles. Y es probable que otras bolsas más baratas den mejores retornos, lo que implica que los inversionistas deberían subponderar el mercado estadounidense. Esta conclusión sólo es aplicable para el largo plazo, advierte. Hay un tema de timing, entre otras materias, que también es relevante.

Datos a tener en cuenta:

  • Al analizar los cinco principales mercados accionarios (Francia, UK, Japón, Alemania y EEUU) se concluye que están fuertemente correlacionados con Estados Unidos, por lo tanto, una gran cantidad de mercados van todos juntos hacia arriba o hacia abajo.  Esta tendencia se ha ido estrechando a medida que pasa el tiempo.
  • Los mercados accionarios no estadounidenses suelen ser más volátiles. Si el mercado de los EEUU va a la baja, los otros mercados probablemente se hundirán aún más en el corto plazo.
  • Las correlaciones han tendido a converger. Incluso en los últimos 20 años el mercado estadounidense ha sido menos volátil que otras bolsas.
  • La combinación entre alta volatilidad y fuerte correlación implica que los inversionistas no deberían subponderar la bolsa norteamericana justo antes de que caiga.
  • Desafortunadamente el pobre desempeño de los mercados no estadounidenses durante los “bear markets” no guardan un balance simétrico con su comportamiento durante los períodos “bull”. En varios período de fuertes retornos de las bolsas norteamericanas, los mercados no estadounidenses han tendido a proveer relativamente pobres retornos, por ejemplo, este caso se dio desde fines de febrero de 2009 hasta fines de mayo de este año. En este período, las acciones norteamericanas dieron una rentabilidad de 23% contra el 18% de cinco mercados distintos a EEUU (G-5)
  • El mejor momento para estar subponderado en acciones de EEUU parece ser el comienzo de los períodos de baja, es decir, cuando no están cayendo particularmente fuerte. Esta idea es aplicable por un corto tiempo. El mercado bursátil de Estados Unidos está caro, dice el autor, y una gran baja debe producirse. “Yo asumo que esto deberá ocurrir en los próximos dos o tres años. Si eso sucede y los inversionistas son pillados con una subponderación en los EEUU, seguramente su portafolio se verá más desfavorecido y necesitarán estar protegidos por una cartera internacional diversificada y efectivo disponible.
  • PARA VER LOS GRAFICOS

 Publicado por Financial Times, viernes 4 de julio de 2014

 

 

Marina Keegan: una joven escritora que murió demasiado pronto

En otoño de 2011, Marina Keegan publicó un ensayo en el diario de su college en Yale. “Aún las alcachofas tienen dudas” que trataba sobre las elecciones que debía hacer la élite de estudiantes de la Liga Ivy.

Keegan, que también escribía y actuaba obras de teatro, lamentaba cómo muchos de sus pares -un cuarto de los egresados de Yale, calculaba- estarían pronto persiguiendo carreras muy bien pagadas en Wall Street o en consultorías.

Esto complicaba a Keegan, quien fue una activista del movimiento Occupy y sirvió como presidenta del Yale College Democrats. El ensayo fue más allá de Yale cuando fue tomado por el New York Times, y alimentó una discusión más amplia sobre qué es lo que debía hacer la juventud más inteligente de EEUU con su vida. Se vivían los años post crisis subprime y tiempos de recesión económica.

Justo antes de graduarse en mayo de 2012, Keegan escribió el tema de portada del especial de graduación de Yale Daily News. “Lo opuesto a la soledad” (“The opposite of loneliness”) que fue una plegaria a sus compañeros de no gastar su tiempo y hacer algo que valiera la pena por el mundo.

Ella solía escribir en primera persona plural y en esa ocasión lo volvió a hacer: “Podemos cambiar nuestras mentes. Podemos comenzar nuevamente… La noción de que es demasiado tarde para hacer algo es cómica. Hace reír. Nos estamos graduando de college. Somos tan jóvenes. No podemos, nosotros no DEBEMOS perder el sentido de lo posible porque al final, es lo único que tenemos”.

Marina Keegan murió en un accidente automovilístico, pero su computador fue encontrado entre los restos del auto. De ahí se rescataron las historias de amor, la extrañeza de regresar a casa, las reflexiones sobre la vida y la muerte, las dudas sobre sí misma de una joven de 22 años que dio origen al libro ‘The Opposite of Loneliness: Essays and Stories’ by Marina Keegan (Simon & Schuster, £12.99).

Publicado por Financial Times, 20 de junio de 2014. Seguir leyendo → “Marina Keegan: una joven escritora que murió demasiado pronto”

El día en que el constitucionalista Zapata le quitó el piso a sus clientes

El abogado Patricio Zapata ha sido uno de los principales defensores de la constitucionalidad de la Reforma Tributaria y aunque ha tenido ciertas posiciones críticas, entre sumas y restas, su posición es favorable al proyecto de ley.

Pero no todo es tan claro y refrescante. En la ronda de preguntas, de la audiencia que se llevó a cabo el lunes 9, el senador RN José García Ruminot le preguntó si él era el autor del informe presentado por la Asociación Nacional de Bebidas Refrescantes (Anber). Zapata reconoció la autoría de dicho documento.

La pregunta tenía su razón de ser. Y el lunes recién pasado, Francisco Dihasarri, en representación de Anber, volvió a plantear los argumentos que levantaron Zapata y Germán Concha en dos documentos. El ejecutivo dijo que el impuesto que grava a las bebidas con azúcar “es discriminatorio porque grava sólo un nutriente que es el azúcar. La ley de alimentos indica que hay cuatro nutrientes: grasas saturadas, azúcar, sodio y calorías. Y dentro de ese nutriente, sólo se afecta a una sola categoría: las bebidas azucaradas”, señaló.

Pero una semana antes y frente a la misma audiencia, Patricio Zapata dijo: “yo soy el autor del informe donde dije que había problemas en la forma en que estaba redactado el artículo de las bebidas con azúcar. Ese asunto fue corregido en la Cámara de Diputados” al fijar el porcentaje de azúcar sobre el cual comienza la bebida a ser gravada.

Zapata señaló que la ley no permite discriminar, pero si el legislador entrega los fundamentos para distinguir entre un contribuyente y otro, ello “despeja la arbitrariedad”. Concluyó que la “no arbitrariedad tiene que ver con una argumentación razonable” y, a su juicio, esto ya se habría subsanado en la Cámara Baja.

Sin embargo, sus “antiguos” clientes no creen lo mismo y volvieron a dejar los informes de Zapata y Concha.

 

Fusiones y adquisiciones a nivel global: Menos acuerdos, pero de mejor calidad

  • David Cogman es el socio principal de la oficina en Shangai de McKinsey y acaba de publicar este artículo sobre fusiones y adquisiciones (M&A) en 2013, que según las cifras que maneja la firma consultora, el valor creado continúa por sobre la tendencia de largo plazo, aunque el volumen de contratos declinó.
 La cantidad de valor creado por las fusiones y adquisiciones (M&A) en 2013 se sigue comportando por sobre el promedio del largo plazo, pero el volumen de acuerdos ha bajado. De acuerdo al análisis de McKinsey, el valor neto, medido como el valor del acuerdo agregado (DVA), cayó a 12%, desde 12,9% en 2012, aunque se mantiene considerablemente por arriba del promedio de los últimos 15 años. (Gráfico 1)

Los adquirentes continuaron capturando más valor, no obstante encontrarse por encima de la media de largo plazo.

Los compradores también continuaron mejorando la captura de valor para sus accionistas. La proporción de los acuerdos seguidos por un declive del precio de la acción de la firma que hizo la adquisición -entendido como el porcentaje de sobreprecio (POP)-, cayó a un nuevo mínimo de 45%, significativamente mejor que el promedio histórico de 58%. (Gráfico 2)

De hecho, desde 2010, más de la mitad de todos los tratos ha dejado a las firmas compradoras y compradas valiendo más cuando están juntas que cuando actuaban por separado. Incluso aquellos compradores, que eran percibidos como cediendo gran parte del valor creado por la fusión a los accionistas de las empresas adquiridas, están al menos no destruyendo su valor. Su retorno promedio agregado ha estado levemente positivo en los últimos cuatro años.

Exhibit 2

 El número de sobrepagadores cayó

Aunque las M&A parecen estar creando más valor, las compañías se estarían esforzando menos. El volumen de M&A pueden haberse más que duplicado en la pasada década en términos absolutos, pero en proporción a la capitalización global del mercado accionario, el nivel en 2013 fue más o menos lo mismo que lo marcado en el piso del ciclo de M&A (2002 y 2003). Fue también sustancialmente más bajo que el peak de actividad de M&A en 2007, cayendo desde 9,1% de la capitalización global del mercado accionario ese año a 7,4% en 2013.

Publicado por Mckinsey, Junio de 2014

Joseph Stiglitz y el precio de la desigualdad

  • La desigualdad presenta un riesgo importante para el progreso humano y conlleva un alto precio económico. 
  • Un sistema educativo “fragmentado”, las leyes fiscales y el gobierno corporativo son algunas de las causas principales del problema en los Estados Unidos, país que tiene  las peores puntuaciones en términos de desigualdad en el mundo desarrollado, afirma el profesor Joseph E. Stiglitz, Premio Nobel de Economía y destacado economista. 
  • En el video que tiene un texto adjunto, el profesor Stiglitz discute las implicancias futuras de la desigualdad y explica por qué los países escandinavos presentan los mejores indicadores en términos de movilidad social y de igualdad de oportunidades. 

Publicado por Credit Suisse Institute, vienes 30 de mayo de 2014