La compra del 8% del Bank of Shanghai por 470 millones anunciada esta semana por Banco Santander no es un movimiento aislado. Forma parte de una estrategia encargada por Emilio Botín a su número dos, Javier Marín, para tapar los ‘agujeros’ que le faltan a la entidad española para estar a la altura de los mayores bancos del mundo. Y es que, mientras Santander es un gigante internacional en banca minorista y de consumo, flaquea en otras tres patas que le impiden jugar en la Champions: banca mayorista, gestión de fondos y Asia. Las últimas acciones de la entidad van en esa dirección y se anticipan más movimientos en el futuro.
Publicado por El Confidencial, domingo 15 de diciembre de 2013.